¿Qué leer en verano?

Desde Cluny siempre apostamos por lo clásico, en la moda y también en el arte, en todas sus formas. ¿Por qué? Desde luego, creemos que de alguna forma el canon va constituyendo aquello que denominamos clásico o clásicos y este mote hace que se establezca cierta atemporalidad.

Una camisa blanca va a seguir siendo un comodín en cualquier guardarropa, así como esperamos ver en cualquier casa algún tomo de Homero, o bien El Cid o el Quijote.

Interesantemente, muchos clásicos de la literatura coinciden con ser contundentes ladrillos de más de trescientas páginas y, desafortunadamente, el otoño nos impediría leerlos o releerlos. Por ello, te proponemos 5 clásicos de la literatura universal que son breves - o bien de una lectura ligera-y que vas a poder leer antes de que la locura empiece.

1- Pedro Páramo - Juan Rulfo

Es una destacada obra del boom latinoamericano, entre los 60s y 70s, cuando la obra de Latinoámerica se hizo popular en el resto del mundo. Como ruptura con la tradición anterior, Pedro Páramo construye la búsqueda de la identidad desde el quiebre y la fragmentación del discurso. En ese sentido, el lector tiene un rol activo en la reconstrucción de la historia de un hijo que va en la búsqueda de su padre.

2- La tercera palabra - Alejandro Casona

La dramaturgia de Casona fue considerada en su momento como aleccionadora, y eso derivó a que sea una lectura frecuente en las secundarias en algún momento. La tercera palabra pone al lector en una obra de teatro sobre el amor, la pasión y las relaciones interpersonales; esta es una obra cuya intensidad en las palabras desata los sentimientos más abrigados.

3- Bouvard y Pecuchet - Gustave Flaubert

Esta obra rescata una absurda e interesante historia de dos hombres que se transforman en amigos y estrechan su amistad en base a intereses comunes. Estos hombres deciden jubilarse e irse a vivir juntos al campo para poder disponer de abundante tiempo que dedicar al estudio de diversas áreas de conocimiento. Es una historia en la que abundan el humor, la ironía y el cinismo. Absolutamente imperdible.

4- Esperando a Godot - Samuel Beckett

Una obra de teatro representativa del teatro del absurdo que es de lectura obligatoria, sin peros. El ritmo de los diálogos, la ansiedad por el futuro, la dejadez y, por supuesto, el absurdo tornan esta dramaturgia en una obra tanto intensa como impredecible cuando dos vagabundos llamados Vladimir y Estragon que esperan en vano junto a un camino a un tal Godot, con quien (quizás) tienen alguna cita.

5 - Relatos de Scott Fitzgerald

Quizá la obra más mencionada de Fitzgerald sea El Gran Gatsby, sin embargo, no se debe dejar de lado su capacidad  como cuentista y relator. De hecho, las nouvelles como El extraño caso de Benjamin Buttom, entre otros, poseen un ritmo y una destreza literaria significativas, por lo que recomendamos visitarlo o revisitarlo. Entre nuestros relatos preferidos se encuentran "Berenice se corta el pelo" y "Babilonia revisitada".

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